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Conoce la Apiterapia, salud natural

Terapia con apitoxina (veneno de abejas) con fines terapéuticos y medicinales, 100% natural sin efectos secundarios.

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Efectos beneficiosos

Los beneficios son de tipo analgésico, antiinflamatorio, neuroestimulador e inmunodulador y fortalece el sistema inmunológico.

¿En qué consiste?

El tratamiento consiste en aplicar apitoxina 100% activa en dosis controladas (microdosis) inoculándola directamente desde el aguijón de la abeja.

Con el fin de

Mejorar la calidad de vida: reduce y elimina dolores, en particular los dolores crónicos. Fortalece el sistema inmunológico, combate estados de estrés, depresivos y de insomnio.

Test alérgico

Antes de empezar a aplicar el veneno se realiza un test para asegurar que la persona no es alérgica.

Especialista titulada en Apiterapia por la Escuela Internacional de Apiterapia Bee Natura.

Estaré encantada de ayudarte y resolver cualquier duda que tengas.

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Visitas en Sentmenat (a 25' de Barcelona) y en Vic (Osona)

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Apicultores de pasión. Cuidamos las abejas, respetando el bioritmo de la colmena y su entorno natural.

Qué afecciones se tratan con la Apiterapia

Mejorar el dolor de codo con apiterapia
Mejorar el dolor de cadera con apiterapia
Mejorar el dolor de hombro con apiterapia
Mejorar el dolor de lumbares con apiterapia
Mejorar el dolor de cervicales con apiterapia
Mejorar el dolor de rodilla con apiterapia
  • Reducir / desaparecer dolores
  • Fortalecer el sistema inmunológico
  • Enfermedades reumatológicas
  • Insomnio
  • Depresión
  • Tratamiento enfermedades autoinmunes
  • Mejora de la circulación sanguínea
  • Problemas de piel
  • Infecciones bacterianas
  • Infecciones virales
  • Dolencias cardiovasculares
  • Problemas pulmonares

Sabías que...

Preguntas frecuentes

La Apiterapia es una biomedicina 100% natural basada en la inoculación del veneno de las abejas y en el uso complementario de los derivados de la colmena para beneficio de la salud humana. Lo que hoy llamamos Apiterapia también lo practicaban los egipcios, los incas, los chinos, los griegos y los romanos hace cientos de años usando las matérias apícolas para tratar problemas médicos.

Los riesgos son para las personas alérgicas a la apitoxina. Se recomienda antes de empezar con la terapia hacer un test de alergia.

Contraindicaciones en personas con marcapasos, personas epilépticas, personas en diálisis, personas que utilicen anabólicos, personas alcohólicas o que consuman drogas.

No se recomienda la terapia a mujeres embarazadas, ni niños menores de 12 años.

La Organización Mundial de la Salud estima que aproximadamente el 1% de la población mundial podria presentar alergia al veneno de abeja, para prevenir este riesgo se deben realizar test previos.

No, ya que se sensibiliza aplicando frío local en la zona donde se picará antes y después de ejecutar la picadura.

Lo normal será una reacción con enrojecimiento local, afiebramiento local y prurito (picor local). Síntomas transitorios que duran algunas horas (hasta 2 o 3 días en las sesiones iniciales) y que van decreciendo según se avanza el tratamiento.

El veneno, con la melitina y la apamina que contiene, activa la circulación sanguínea, regula la presión arterial, relaja los capilares, promueve la fluidez de la sangre y aumenta la producción de glóbulos rojos. Tiene una acción antiinflamatoria, principalmente debido a la melitina, porque estimula la producción natural de cortisol, el principal componente de la cortisona (la hormona más activa en las glándulas suprarrenales).

Por otro lado, ciertos componentes del veneno están involucrados en la reducción de la percepción del dolor, al igual que la aspirina. El veneno reduce el dolor al actuar sobre todo el sistema nervioso central y las fibras motoras. Por tanto, puede tratar la inflamación de las articulaciones, músculos y tendones. El veneno de abeja es particularmente conocido por aliviar el dolor reumático.

El tratamiento consiste en aplicar apitoxina 100% activa en dosis controladas (microdosis) inoculándola directamente desde el aguijón de la abeja. Se trata de una terapia progresiva, es decir, que nuestro organismo necesita un tiempo de adaptación para asimilar las propiedades terapéuticas de la apitoxina.

Parámetros de aplicación: Microdosis: 10% de inoculación del veneno total que contiene el aguijón de una abeja, para mantenerse dentro de los parámetros terapéuticos. Frecuencia: 1 sesión por semana. Duración: 8 sesiones mínimo

Los efectos de la apitoxina son acumulativos: existe una fase adaptativa del organismo frente a la apitoxina, proceso que se supera gradualmente pasada la 4 o 5 sesión. A partir de aquí el bloqueo del cuerpo hacia la apitoxina disminuye, se genera una fase de tolerancia, y los efectos terapéuticos se hacen más evidentes, llegando a la máxima asimilación en la 8 sesión.

Se recomienda una periodicidad semanal ya que hay que esperar un mínimo de 4 días entre sesiones y un máximo de 15 días para no perder el efecto acumulativo de la terapia.

La prolongación del tratamiento dependerá de si se trata de una dolencia o de una enfermedad.

Los resultados no son una regla igual para todos los pacientes, hay diversos factores como la edad, el sexo, el abordaje de la enfermedad o dolencia, aspectos psicoemocionales, aspectos de vida, etc.

Dolencias simples: tendinitis, bursitis, codo tenista _ 8 sesiones suele ser suficiente.Artritis_ Mínimo 12 meses.Tratamiento en enfermedades autoinmunes_ Los resultados son parte de un tratamiento de entre 12, 24 o 36 meses, con aplicaciones de hasta 15 microdosis.